El Terracotta Museu está dedicado a la preservación, la conservación y la difusión la cerámica, patrimonio cultural de La Bisbal. Tras su visita, conoceremos, ampliamente, cuál ha sido el origen y la evolución de la principal actividad económica de esta zona de l’Empordà, un legado transmitido de generación en generación, y que ha llevado más lejos el significado del oficio de ceramista.
El Terracotta Museu está situado en una de las fábricas más antiguas de La Bisbal, que inició su actividad de revestimientos cerámicos en el año 1922 y gracias al aumento de la producción no paró de crecer y ampliarse hasta 1970. Con el cese de la actividad, la fábrica cierra sus puertas en 1984 y pasa a ser propiedad del Ajuntament de la Bisbal, quien destina los terrenos a la instalación del Museu.
Varias han sido las reformas que el edificio ha sufrido tras su apertura en el año 1991, la primera ampliación fué en 1998 en la que se trabajó para crear un nuevo almacén, renovar el tejado y la estructura del edificio, además de realizar trabajos básicos para cumplir la normativa vigente.
En el año 2010, el Terracotta Museu cierra de nuevo sus puertas para iniciar una segunda etapa de rehabilitación, gracias a una subvención del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), pero que le ha llevado a estar más de 5 años inactivo.
Tras la finalización de los últimos trabajos y la inversión en un nuevo proyecto museográfico, abre finalmente el pasado mes de junio (2016), y se convierte claramente en la apuesta cultural de mayor proyección de la ciudad.
Actualmente el Terracotta Museu cuenta con 6.000 m2, dividido casi a partes iguales entre patios y espacios cubiertos, resulta uno de los edificios de arqueología industrial más singulares de l’Empordà, una muestra clara del tipo de industria al que pertenece, con elementos integrados en su estructura como balsas de colar la tierra, chimeneas y hornos.
El fondo de la exposición permanente, cuenta con más de 8.000 piezas de objetos de cerámica y utensilios de fabricación, donados en su mayoría por fabricantes de la localidad. Además se enriquece con una importante colección de más de dos mil vasijas provenientes de toda la Península Ibérica e islas, cedida por la Generalitat.
Terracotta Museu también nos ofrece aspectos más técnicos, basados en los procesos artesanales llevados a cabo en la elaboración, creación y decoración dentro de la indústrica de la cerámica. Junto a las exposiciones, el nuevo espacio está preparado para acoger un abanico más amplio de actividades culturales, conciertos musicales, conferencias, servicios educativos, etc.