El Museu d’Història de Sant Feliu de Guíxols se ha convertido en uno de los espacios más interesantes de este municipio situado en el corazón del Baix Empordà, en plena Costa Brava. En él, se desarrollan múltiples actividades culturales y exposiciones durante todo el año, acercando la historia de la zona a los visitantes.
Las instalaciones del museo están situadas en tres edificios históricos originales de la localidad, un marco perfecto para empezar a conocer el pasado desde emplazamientos singulares que jugaron un papel protagonista en el mismo. El Monasterio de Sant Feliu, cuyos orígenes se remontan al siglo X, alberga la sede central del museo y combina diferentes estilos arquitectónicos. El lugar ha sido testigo de numerosos acontecimientos que se pueden conocer en las exposiciones que acoge.
Por otra parte, el edificio de Salvamento Marítimo nos enseña cómo eran los rescates marítimos, desde el siglo XIX, mostrando las herramientas y métodos que se han utilizado en las diferentes etapas. Completa el conjunto la casa Albertí, donde se pueden ver de forma permanente las obras del pintor local Josep Albertí.
Las muestras permanentes del Museo de Historia de Sant Feliu de Guíxols también incluyen fondos arqueológicos que van desde el paleolítico hasta la época medieval. En el Monasterio de puede conocer el papel de este edificio en la historia de la localidad así como una interesante exposición sobre el ejercicio de la práctica sanitaria en poblaciones aisladas y en tiempos pasados.
A lo largo del año, el museo organiza diferentes actos y exposiciones temporales relacionados con diferentes aspectos la vida en el entorno de Sant Feliu de Guíxols. Del mismo modo, se ponen a disposición de los centros educativos actividades relacionadas con la divulgación de aspectos históricos y patrimoniales del municipio y sobre ciencias de la salud.
Como complemento a las exposiciones, el museo organiza regularmente visitas guiadas sobre los diversos temas que acoge regularmente, como la salud desde una perspectiva histórica, la vida monástica benedictina, o las condiciones de vida en la villa medieval, por mencionar solamente algunos ejemplos. Durante el verano también se puede asistir a entretenidas visitas teatralizadas y musicadas muy apropiadas para el público familiar. El museo cuenta con un servicio de publicaciones, que periódicamente divulga las informaciones relevantes sobre su actividad.
Finalmente, dentro el antiguo monasterio se ofrecen diferentes espacios polivalentes y servicios para celebración de congresos y acontecimientos, todo ello en un entorno privilegiado en uno de los lugares más atractivos de la Costa Brava. En definitiva, el Museo Historia de Sant Feliu de Guíxols es un espacio consolidado como elemento central de la actividad cultural del municipio.